Foto: Cortesía
La
Virgen de Fátima reúne este sábado 13 de mayo a la Iglesia católica y a sus
fieles en una gran fiesta, al conmemorarse los primeros 100 años de la aparición
de la Santísima Madre de Dios bajo esta advocación mariana.
La celebración tubo su cita principal en la localidad de la Cova da Iría, ciudad de Fátima, a 120 kilómetros de Lisboa, capital de Portugal, donde se encuentra el Santuario de Nuestra Señora del Rosario de Fátima.
La celebración tubo su cita principal en la localidad de la Cova da Iría, ciudad de Fátima, a 120 kilómetros de Lisboa, capital de Portugal, donde se encuentra el Santuario de Nuestra Señora del Rosario de Fátima.
Hombres,
mujeres y niños, sin perturbarse ante el clima frió que soplaba sobre la
explanada, se transformo en luminarias que se unieron, además, en una sola
oración del rosario, como lo pidió Fátima hace 100 años.
Bajo
este concepto, con más de ocho millones de peregrinos que se concentraron en la
enorme plazoleta de Fátima, quienes, además del regocijo de participar en esta
festividad, pudieron obtener indulgencia plenaria que autorizó la Iglesia este
año por esta ocasión.
Cien
años después de que aseguraran haber visto a la Virgen María, los pequeños
hermanos pastores Francisco y Jacinta fueron declarados santos por el papa en
el, ante medio millón de emocionados fieles.
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Los
pequeños pastores, humildes e iletrados, murieron de gripe española a los diez
y nueve años, respectivamente, algunos años después de haber visto en 1917 seis
apariciones de la madre de Jesús. Ambos, enterrados en la Basílica de Fátima,
se convierten en los santos más jóvenes de la Iglesia católica que no murieron
en martirio.
Redacción: Jhoan Gutiérrez / World Stereo
